En esta clase se volvió a hacer un repaso de los momentos de la duda, tengamos en cuenta el siguiente esquema para ordenar el desarrollo de la meditación 1.
Nuestro objetivo: El criterio de verdad, llegar a la certeza, aquello que no se pueda dudar y empezar a construir desde ahí.
1 - El método de la duda, atacar directamente los fundamentos de nuestras creencias para poder examinarlas todas juntas sin necesidad de examinar una por una
2 - Primer momento: objetos "lejanos", ataque a los sentidos
3 - Segundo momento de la duda: Objetos "cercanos": Argumento del sueño, ataque por completo a los sentidos y a la existencia del mundo externo
4 - tercer momento de la duda: Lo complejo, ataque a la imaginación y a lo complejo. Lo simple podría tener carácter de verdad, por ejemplo la matemática
5 - Cuarto momento: Genio maligno, posibilidad constante del error ataque a la razón humana, podría estar equivocado hasta en lo más simple
Segunda meditación:
Primera verdad: El cogito, la existencia del pensamiento
Es autoevidente, lo cual significa que se verifica a sí mismo, por ejemplo decir que dudo es afirmar que de hecho dudo y que por tanto pienso, pero si pienso existo por tanto no puedo dudar de que existo. Cuando la duda llega a dudar de sí misma se revela la existencia del pensamiento. No se puede refutar ya que ningúna otra proposición podría afirmar "no existo", si afirmara esto sería cierto que lo afirmo, si afirmo algo pienso y si pienso existo.
No es una conclusión, ya que no parte de ningúna principio previo. Digamos a este respecto lo siguiente. Cuando afirmamos "si pienso entonces existo" lo unico que se afirma aquí es la existencia del pensamiento, pensar y existencia son lo mismo ya que refiere a la existencia del propio pensamiento, por tanto mi premisa no es "pienso" ni mi conclución "entonces existo", en realidad pienso y existo son una sola afirmación y se autoverifican.
En la próxima clase trabajaremos la distinción entre alma y cuerpo, el ejemplo de la cera y la diferencia en sus cualidades y un resumen de como prueba Descartes la existencia de Dios y el mundo externo.
